Recuerdos del futuro

En el principio no habia nada,
pero el espíritu de Dios flotaba en el vacío infinito.
Y dijo Dios "Hágase la luz".
Y la luz se hizo.

El poder de las palabras. Las palabras, en las que tantas veces me enredo. Y el tiempo, que tanta veces robo, instantes, momentos, debería estar haciendo esto, y hago otra cosa. Tengo la mente a veces hecha un lío, como un libro cerrado, no muestra su interior, y sin embargo, cuanto más escribo, cuanto más me pierdo en mi, a veces, tengo la suerte de encontrarme.

Ayer volví a escribir en mi cuaderno azul, con la paloma de Picasso en la portada, con mi pluma roja. Y releí lo último que habia escrito. Y me di cuenta lo poco que había cambiado mi pensamiento desde mi última anotación, hará unos meses. Escribí sin esfuerzo un par de frases y encontré paz entre aquellas hojas aún en blanco, no como un reto, si no como un refugio. Por eso quizá se me hace tan difícil escribir aqui, en el aire, casi en mitad de la nada. Pero también en cierto modo necesito darme cuenta que tengo algo más que contar, al margen de relatos y poemas antiguos.

Un reto, y una esperanza. Asi surge este blog.

Reto, de ser capaz de compartir mis pensamientos; esperanza, de poder compartirlos.

Y que quien comparta, disfrute.

Navegante, bienvenido.